La vida te ofrece una oportunidad a veces, se dijo, pero cuando eres demasiado cobarde o indeciso para aprovecharla, la vida recoge sus cartas, hay un momento para hacer las cosas y para abrazar una felicidad posible, ese momento dura algunos días, a veces unas semanas e incluso unos meses, pero sólo se presenta una única vez y, si quieres rectificar más tarde es simplemente imposible, ya no queda sitio para la esperanza, la creencia y la fe, subsiste una resignación suave, una piedad recíproca y entristecida, la sensación inútil y justa de que podría haber ocurrido algo, de que sencillamente uno se ha mostrado indigno del don que le acaban de hacer.

El mapa y el territorio, Michel Houellebecq

No hay comentarios:

Publicar un comentario